martes, 20 de octubre de 2009

El error de la diputada

Federico Ruiz W.
Politólogo

Mientras veo un debate apasionado, vehemente, con cierta picardía en el Congreso español sobre los presupuestos del Estado, no puedo más que lamentar la calidad del debate político en Costa Rica.

¿Podrá ser creible, que aquí se "discuta" ya por demasiados días, que la Vicepresidenta de nuestra Asamblea Legislativa, utilice una avioneta para realizar las gestiones que sean?

Mientras proyectos importantes, como la reforma al régimen de zonas francas, esperan iniciar su discusión, ayer se perdió una jornada completa, para que algunos fariseos, continuaran con ese discurso, aparentemente protector de la moral, pero no es más que la manifestación de una frustración velada, por carecer del poder de gobierno.

Sí, sí cometió la diputada Ballestero un error. La de no hacerle frente al más absoluto aldeanismo que el PAC le ha regalado al país. Como error ha sido el de propios y extraños de buena fe, que consideran reprochable, lo que en cualquier otro lugar del mundo sería lo natural.

La posición que encabeza el PAC (seguida por los otros como caballos de carretón), tira dos gravísimos dardos contra el sistema democrático. En primer lugar, porque no le da el papel que le corresponde, a la dignidad de la representante popular que ocupa, ni más ni menos, la Vicepresidencia de la Asamblea Legislativa.

Cualquier diligencia, por pequeña que parezca, que deba realizar un diputado de la República en el ejercicio de su cargo, debe contar sin miramientos, con el apoyo de TODO el aparato Estatal y sus recursos. INCLUIDA aquella función política partidista, que acerque al diputado a su base electoral.

Esto me lleva al segundo cañonazo contra la democracia costarricense. Es aquel, que de forma solapada, pero sistemática, se menosprecia, se sataniza, se criminaliza, el trabajo de los partidos políticos, como pilar fundamental en la mediación de los intereses populares y su resolución desde el poder.

Con el cuento de la beligerancia política, la posición del PAC, aceptada por lo sectores más coservadores del país (ya de izquierda, ya de derecha), ha llevado prácticamente a la privatización total de las agrupaciones políticas.

"No debe prestarse una escuela, un colegio, o un salón de la Asamblea Legislativa para una asamblea de un partido, porque eso es abusar de los recursos públicos".

"No debe un diputado, utilizar vehículos, para asistir a reuniones del partido, porque eso es abusar de los recursos públicos".

"No debe, un miembro del Ejecutivo, hacer declaraciones sobre su filiación política, porque eso lleva al abuso de los recursos públicos".

Solo aquellos, que de forma antinatural, se vean completamente separados de la acción estatal, tienen derecho a participar activamente de los partidos. Primer paso para su destrucción. Nada más véase el nuevo Código Electoral (desgraciadamente apoyado por la Diputada Ballestero), para darse cuenta, que prácticamente ningún servidor público que pretenda liderar un partido, pueda participar en él.

¿Es función de un diputado, como representante popular, asistir a las asambleas de un partido? No solo es una función, sino es una OBLIGACION en razón del fortalecimiento del sistema de partidos y por tanto del sistema democrático.

¿Hay alguna diferencia que se viaje en una avioneta del Estado, a viajar en un automóvil del Estado? La única: el aprovechamiento del tiempo.

¿Hay alguna diferencia que en el automóvil de la diputada viaje su hija y su asesor, a que lo hagan en una avioneta? Ninguna. ¿Cuál es el problema de aprovechar el espacio?

Ruego porque llegue el día del fin de ese aldeanismo político al que nos hemos visto sometidos por el PAC. Ruego porque llegue el día que la gente se sobreponga a ese lavado de cerebro impulsado por el PAC. Ruego porque llegue el día en que desaparezca el PAC.